Las 5 mejores experiencias para tomarse su tiempo

No hay nada mejor después de un caluroso día de verano que ir a dar un pequeño «llaque» (paseo) al anochecer, justo después de cenar, al muelle. ¡Hasta el final del muelle!
Allí, frente al mar, refrescado por la ligera brisa vespertina, respire el aire yodado del Mediterráneo.
A continuación, dé la vuelta y admire la magnífica vista de Banyuls por la noche al son del chapoteo de las olas. Calmados y refrescados, ¡sólo queda volver a casa!

Secreto de Banyulenc: este pequeño paseo tiene un efecto mágico en los pequeños a los que les cuesta conciliar el sueño por la noche.

Como el paseo marítimo es un viaje de ida y vuelta, es obvio que tendrá que recargar las pilas antes de volver. ¿Y qué mejor que sentarse en la terraza de un café, a la sombra de los plátanos, para disfrutar del mar y del ambiente tan especial de Banyuls-sur-Mer?

Bailes del miércoles por la noche
No hace falta ir a Ibiza, Banyuls está ahí.
No hay vacaciones en Banyuls sin participar en el tradicional baile discotequero de los miércoles por la noche en la plaza… Desde los primeros compases, no dude en contonearse, reírse, en definitiva, divertirse. Al descubrir la alegría de una pista de baile al aire libre, creará recuerdos de vacaciones inolvidables con amigos o familiares que harán de Banyuls el lugar ideal para sus vacaciones.

En Banyuls, hay un espectáculo pirotécnico al año, durante la Fiesta Mayor (también llamada Fiesta de Banyuls) que se celebra cada año durante una semana a mediados de agosto. En el programa: conciertos, carrera de carros de caballos, carnaval de verano, barbacoas en la playa, juegos infantiles en la playa, passe-ville (desfile por las calles del pueblo), ceremonia conmemorativa, sardanas, etc. En resumen, ¡es una fiesta! En esta ocasión, el sábado por la noche, un magnífico espectáculo de fuegos artificiales ilumina la bahía de Banyuls. Se puede admirar desde la playa, ya que se dispara sobre el agua, desde el puerto, desde las alturas de la ciudad, pero también desde un barco. Es un momento suspendido en la vida del pueblo, la cabeza en las estrellas.